Mudarme de un país a otro no es mudar mi país conmigo: la realidad de la expatriación

Uno de los principales retos con los cuales nos enfrentamos al momento de aceptar una oferta de traslado laboral o expatriación, es mudar nuestro estilo de vida a otro país.
No importa el destino al cual nos dirigimos, el primer choque con el que quizás nos vayamos a encontrar es que el país que nos está acogiendo es muy diferente del nuestro. Y ahí comienza nuestro camino de la decepción: aquí no tienen ésto, aquí hacen otra cosa, es que aqui...

Es importante tener en cuenta que NO estamos mudando nuestro país con nosotros, estamos adentrándonos es el maravilloso ejercicio de aprender de una cultura totalmente nueva, costumbres, clima, escasez, abundancia.

El ejercicio de valorar cada cosa diferente nos va a facilitar el ejercicio de adaptación a nosotros y a nuestra familia.

No forcemos la adaptación, pero abracemos la diferencia y sobre todo, hagamos más sencilla la vida de nuestros nuevos amigos y seres queridos!

Una razón para vivir en Tegucigalpa

El link anterior es un ejemplo que si encontramos las razones, vamos a valorar mucho más dónde vivimos.